Juan Pedro Raissignier quien entre 1922 y 1929 envió numerosísimas cartas - a los más diversos lugares del mundo - solicitando donaciones bibliográficas. La variedad de autores y obras que poseía la Biblioteca en sus comienzos ilustran el compromiso y dedicación de sus impulsores. Entre los autores que se podía leer, se encontraban Antonio Soto (Boy), Reymond Poincaré, Paul Doumer, George Clemençeau, Reymond Poincaré, Henry Barbusse, Santiago Ramón y Cajal, Concha Espina, Menéndez Pidal, Gabriel D'Annunzzio, Máximo Gorki, Constancio Vigil, entre otros. En total, del exterior se recibieron más de 3000 libros y del interior del país, poco más de 700. El Dr. Francisco Schinca tuvo un rol protagónico en las actividades de difusión cultural y de promoción de la biblioteca. Las palabras del Lic. Carlos Poggi dan cuenta de ello cuando dice que “a cada obra que llegaba, el Dr. Francisco Alberto Schinca – cuyo seudónimo era Duendecillo Fas – le realizaba un juicio literario, que luego se publicabaen “El Carnet del Lector” del diario “El Ideal” juicios que muchas veces fueron reproducidos por “La Nación” de Buenos Aires y “El Mercurio” de Chile”.
En 1928, la Biblioteca Popular de la Unión pasa a ser gestionada por la Intendencia de Montevideo, tras el cese del Consejo Auxiliar de la Unión. A comienzos de 1929, don Juan Pedro Raissignier fue nombrado Primer Director de la Biblioteca, quien había oficiado de bibliotecario y secretario desde el inicio. El 14 de octubre de 1943 se designa con el nombre “Dr. Francisco Schinca”, rindiendo con esta designación, homenaje a uno de sus fundadores.